God of malice (Legado de Dioses 1)

SINOPSIS

He llamado la atención de un monstruo.
Yo no lo he buscado.
Ni siquiera lo he visto venir.
Y, cuando por fin me doy cuenta, ya es demasiado tarde.
Killian Carson es un depredador envuelto en el más sofisticado encanto.
Una persona fría, manipuladora y cruel.
Lo peor de todo es que nadie ve su lado malvado.
Pero yo sí.
Y eso me costará todo lo que tengo.
Huyo, pero ¿sabéis qué pasa con los monstruos?
Que siempre te persiguen.

Genero: Dark Romance

No. de pagina: 515

No. de capítulos: 42

Tropes: Proximidad forzada, Mounstro, Socided secreta

Idioma: Español

Editorial: Montena

Disponible: Digital y Físico

Calificación: ⭐⭐⭐

Romance: ❤️

Spicy: 🔥🔥🔥

Dark: 🖤🖤🖤🖤

RESEÑA

Si bien esta es una relectura después de un año, debo decir que mi perspectiva del libro cambió. El tiempo y las relecturas muchas veces transforman la forma en que percibimos a los personajes o ciertas situaciones, y eso me sucedió esta vez.

Antes de sumergirte en la historia, por favor, lee los trigger warnings (TW). Este libro no es para todo el mundo.

Todos sabemos que Rina es una autora que puedes amar u odiar, sobre todo por las temáticas que aborda y la manera en que construye a sus personajes. Pero recordemos que estamos en un mundo libre: si algún tema o autor no es de tu agrado, eres completamente libre de saltarte su lectura.

Una vez aclarado esto, podemos comenzar.

Podemos decir que el libro tiene un comienzo fuerte, con eventos traumáticos para Glyn. Honestamente, desde ese momento Killian no fue de mi agrado, y si le sumamos que sus padres tampoco me simpatizan, debo admitir que mis expectativas con él eran bastante bajas.

Por otro lado, Glyn es una joven susceptible, reservada y con complejos de inferioridad. Es una chica manipulable, algo que se refleja no solo en su relación con Killian, sino también con quien consideraba su “mejor amigo”.

Aunque tengo mis problemas con los protagonistas —especialmente por la forma en que fueron criados y las actitudes de sus padres—, debo decir que la trama es muy del estilo de Rina: oscura, compleja y con ese constante tira y afloja emocional que tanto la caracteriza.

Disfruté bastante la parte de la iniciación, lo que definitivamente le sumó varios puntos a mi experiencia. Sin embargo, la relación entre Glyn y Killian no me generó la misma emoción que otras parejas de su generación, ni mucho menos la de los personajes de la anterior.

En general, no sentí que el libro ofreciera algo totalmente nuevo, pero sí lo percibí como una presentación a la nueva generación de personajes.

Una historia con los matices oscuros que identifican a Rina, con momentos intensos, una protagonista llena de inseguridades y un protagonista difícil de amar.
Perfecto para quienes disfrutan de las emociones contradictorias y los dramas familiares profundos.